Osos, travestis & indyrock

Después de una semana de merecidas vacaciones blogeras, que mejor que reemprender las actualizaciones con la crónica de Madriz. Lo primero es agradecer a la compañía aerea que justo cuando íbamos a aterrizar y las ruedas estaban rozando la pista volviese a enlairarse otra vez y nos diese unas cuantas vueltas por el cielo de la capital, resultado; 45 minutos de demora y psicosis general, sobretodo de una señora que empezó a decir que nos habían secuestrado y nos iban a estrellar contra las torres Kio. Por si fuera poco, muy a mi pesar, conocí la famosísima T4, que está en medio de la nada y muy lejos de todo, es cómo si en pleno desierto pusiesen una pista y un módulo. El metro de Madriz muy bien, estuve 1 hora de reloj en hora punta enlatado como una sardina con todo tipo de olores corporales y sin escapatoria. Después de éste ameno viaje por fin llegué a casa de Gus, que me estaba esperando para tratarme a cuerpo de rey.

Estuvimos charlando de todo lo acontecido en nuestras vidas ya que hacía mucho tiempo que no sabíamos uno del otro. Nos fuimos un rato de cañas y él se fue a currar (está todo el día currando). Yo me metí en "los huevos de Lucio", empecé a pedir cosas, la chica me miró y luego a mi alrededor para ver si conmigo venía un regimiento de vikingos hambrientos, pero no, todo era para mi. Al finalizar tal comilona la camarera me invitó a un digestivo que mi estómago se lo agradeció enórmemente. Malasaña fue mi siguiente destino, después de deambular por bastantes baretos donde en uno de ellos conocí solo de vista a Flat (que bueno que está) y Ann. Y cómo no, terminé en el 8.5, no hay nada peor que irte a una discoteca de fuera y de Dijey esté "Gato", el del Razz. Le fui a saludar y le dije que no le seguía, que era pura casualidad. A las 4 ya estaba mas que bebido, así que me tocó liarla un poco, me desapareció la cerveza y empecé una exaustiva tarea de investigación, di con ella, la tenía un notas al cual le estuve dando collejas hasta que vino el segurata y nos separó, a él le mando a la otra punta y a mi me hizo un marcaje a medio metro hasta que cerraron el local.

El sábado tocó algo de cultura, ir a un museo y tener la cabeza cómo si unos enanos te la estuviesen martilleando es muy gratificante, os lo recomiendo ferviéntemente. Para mi, el Thyssen es con diferencia el mejor de los tres grandes, nos fuimos a comer algo y luego siesta reconfortante. Por la noche me enteré que era "la noche en blanco", al principio creí que estarían la Kate Moss, el Doherty, Sabina, Maradona y demás ofreciéndote bandejas con "cosas blancas" pero no, resultó ser una noche que todo era gratis, había gran cantidad de actividades socioculturales y conciertos por toda la ciudad. Si pasear por Madriz es muy complicado, ya que es una gran obra, podríais cruzarla entera empalmando de obra en obra, todas las calles levantadas, no os cuento con todo el mundo invadiendo las pocas aceras que quedan, visto que no tenía mucha pinta de mejorar decidí irme a la cama y así poder madrugar e irme al Escorial, ya que sino Nebrija me hubiese caneado a la vuelta.

El Escorial... no sé... muy sencillo, austero, falto de gracia, vas a cualquier palacete de Europa y son súper barrocos, recargados y dignos, éste no. Lo mejor sin duda comer en "la cueva". Por la noche fui a papear a "Juana la Loca", se come y bebe muy bien. Luego cómo tenía un par de horas libres me pasé por el Hot y Enfrete, psssssssss lo mejor que era el Happy Hour y salí de allí haciendo eses. Luego cómo no podía terminar de otra manera acabé en EPT entrando gratis, me lo pasé muy bien viendo toda esa fauna, conocí a "Radiohead" muy majo, con el cual estuve charlando pero entre mi sordera, borrachera y la música super alta no me enteré de casi nada. Lástima que en Bcn no tengamos este tipo de fiestas, "ésta gente es muy rara, estoy pasando miedo, se parecen todos al cuervo".
Y hasta aquí lo que se puede contar, lo demás ni lo sabreis ni os importa.