Himno Generacional

sábado, mayo 20, 2006

Porque yo lo valgo

El otro día llegó mi tía muy guapa con un nuevo peinado y le dije uyyyyy nuevo look nena y me suelta si como el de Amaral y esto me dio que pensar en como somos las mujeres.
Las niñas de veinti pocos se presentan en la Fashion del barrio y sueltan aquello de quiero que me hagas unas extensiones como las de la Britney Spears y salen de allí que parece que les han puesto los restos del esquile de los búfalos del zoo. Porque claro las que se pone la cantante esta de marras van por lo menos a 100 euros ya que deben tratarse de pelo natural mientras que las que te ponen en la Fashion están a 4 o 5. Pero las charinis salen más contentas que un ocho porque se han gastado mucho menos que la Spearse y les ha sobrado para ir al Berska y comprarse un top.
Luego llegamos a la edad jodida (la mía y la de mi tía) treinta y pocos. Pides hora porque se trata de una decisión meditada. No vas a la del barrio. Te vas al centro porque te han dicho que hay una que hace unos peinados super modernos. Llegas, te sientas, hojeas las revistas para ver que está de moda. Quieres arriesgarte y sobre todo quieres que se note ese cambio de imagen, es más desearías ser como la tipa que aparece en las fotos del antes y después. Así era y así me han dejado. Pero cuando llega el momento de la verdad acabas cortándote las puntas, tiñiendote las primeras canas y maldiciendo al peluquer@ que te ha cortado el flequillo a lo Amaral (a petición tuya) y... ¡¡¡¡putada!!!!! durante un mes, hasta que te crezca, cada vez que te mires al espejo te veras como Betty la fea. Antes de poner un pie en la calle ya te has arrepentido de haberte dejado 40 o 50 euros allí dentro.
El sector de los cuarenta es un poco caótico asi que lo voy a pasar de largo.
Llegamos al de los cincuenta-sesenta que es el tramo de las pudientes, las que se pueden pagar el ir cada semana a la peluquera de su barrio, la de toda la vida que ya le ha cogido el tranquillo y que las deja estupendas. Sabe el color de pelo que le gusta, les aconseja unas mechas para dar luminosidad, les hace la manicura y las cejas. Lo chungo es cuando le dicen Me gustaría hacerme un corte de pelo a lo Lola Herrera. Cagada. La tía empieza a ponerse verde porque no sabe como conseguir esos rizos gordos que quedan informales y la clienta en cuestión acaba con una permanente apretada tipo ricchi.
En fin que pese lo dicho ir a la pelu es un capricho goloso que sueles darte porque tu lo vales y aunque tu meta en esta vida sea encontrar al peluquer@ que te deje como la famosa en cuestión acabas yendo al de toda la vida porque te aterroriza cambiar. Más vale lo malo conocido que lo malo por conocer.

La Colorete

1 Comments:

  • Cómo me gusta tu ingenio, tu gracia a la par fresca y satírica.
    ¿Tú antes ya habías escrito, no? En El Pan de los Pobres o en el Descobrir Cuines? Me suenas. Y te voy a seguir muy de cerca... Tu compañero, un poco más flojillo, pero imagino que la presión del proyecto tiene que pesar.Hay tantas espectativas...
    De todas formas, ya le he hablado de este Blogg a mi carnicera Emi, y me ha dicho que se bloggea en tanto en cuanto pueda.
    Felicidades chicos!!!

    By Anonymous Anónimo, at jueves, mayo 25, 2006  

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